No hay turistas en La Restinga para venderles las ostras

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Pesca de ostras en La Restinga, un oficio en extinción tras la caída del turismo. Ascensión González y María Gregoria Vicent.

La playa de La Restinga es quizás la más extensa de Nueva Esparta y del resto del país, pero la crítica situación que vive el turismo nacional, literalmente ha anulado uno de los principales oficios de la mujer nativa, como es la ostrería, del cual han vivido desde hace muchos años.

Actualmente son 28 mujeres las que conforman la Asociación de Ostreras de La Restinga, ente que subsiste a duras penas por la ausencia de turistas en esas hermosas costas a las cuales se llega por carretera, pero los visitantes nacionales y extranjeros prefieren arribar a través del paseo en lancha que dura unos 15 minutos aproximadamente desde el embarcadero del Indio hasta ese pueblo pesquero.

María Gregoria Vicent lamentó que tengan que sacar la ostra de mangle, conocida científicamente como Crassostrea rhizophorae, en jornadas de dos veces a la semana.

Explica que salen remando a fuerza desde sus casas con rumbo a laguna adentro, para comenzar la faena en busca del sustento familiar.

Toda la vida, somos las mujeres las que sacamos las ostras, con todo y que no es una actividad sencilla, insiste.

Agrega que esa dinámica obedece a que ha sido la forma en la que los lugareños han dividido desde hace mucho tiempo las labores del mar.

Ascensión González recuerda que siempre han vivido de la extracción de ostras, pero en los últimos tiempos la situación se les ha puesto cuesta arriba para poder sobrevivir.

Cuando vendemos una docenita de ostras, es que podemos comprar un paquete de harina para las arepas o el funche, pero si no hay a quien venderle, muchas veces tenemos que ir hasta el embarcadero a venderla a los trabajadores de allá, explica.

La otra opción que tienen para obtener ingresos es la confección de collares con la concha de los moluscos, pero esa labor se la encomendaban a los niños del pueblo y ahora las autoridades del Instituto Nacional de Parques prohibieron que los menores se dediquen a esa actividad para que no molesten a los turistas.

Indican que los pocos turistas que están llegando son polacos, pero lo hacen por el paseo por la laguna o para disfrutar las hermosas costas de La Restinga.

Lapatilla.com